lunes, 13 de enero de 2020

Jazz y literatura. Paul Desmond


Desmondismos






Paul Desmond. Quienes le conocieron añaden su ingenio rápido y su facilidad de palabra como rasgos más destacados de la personalidad de este músico. Paul Desmond se graduó en lengua inglesa en la universidad.
Su motivo para no emprender una carrera literaria:

– Sólo era capaz de trabajar en la playa y no dejaba de entrarme arena en la máquina de escribir.

– La literatura es como el jazz. Se puede aprender, pero no se puede enseñar.


– A veces tengo la impresión de que continuamente hay orgías por todo Nueva York, y si alguien dice "vamos a llamar a Desmond" otro le contesta "¿para qué? Seguro que está en casa leyendo la Enciclopedia Británica".

¡Saludos musicales!

domingo, 5 de enero de 2020

Música y filosofía. Arthur Schopenhauer

Arthur Schopenhauer y la música

Arthur Schopenhauer (1788-1860), filósofo de la época de Beethoven, aborda en su sistema filosófico el tema de la contemplación estética. Clasifica las artes jerárquicamente y  sitúa la música en el lugar más privilegiado. Este es uno de los aportes mas revolucionarios en la historia del pensamiento y en el campo de la estética de la música.

 La contemplación estética

El pensamiento de Schopenhauer, como él mismo lo dice, tiene como base la filosofía de Platón y de Kant, así como los Veda y a través de este los Upanishad. “Con esta base el lector estaría excelentemente preparado para escuchar lo que aquí le presento” 
(El mundo como voluntad y representación Vol I). 

Amante de las artes en general, sobretodo tuvo entusiasmo especial por la música, a la que consideraba la voz de la voluntad, la música, dice, nos revela la esencia, mejor que ninguna palabra o cualquier otra cosa. “La poesía nos habla de las causas mientras la música nos muestra los efectos”. Lo que diferencia su filosofía de las anteriores es el cambio de estatus que otorga a la música frente a la poesía, que venía siendo hasta entonces el arte por excelencia. 

La contemplación estética es la vía  que propone Schopenhauer para liberar al individuo del sufrimiento al que es sometido sin tregua, una y otra vez, a lo largo de su vida. El arte, aunque sea por un instante, lo libera.  
    
Acerca de la  contemplación estética propone la clasificación de las artes de la siguiente manera:

Arquitectura 

Su único tema constante es el soporte y la carga. El tema propio de la arquitectura, considerada como una de las bellas artes, son las ideas de los niveles mas inferiores de la naturaleza: gravedad, rigidez y cohesión. (Mundo como voluntad y representación, Vol II)).
     
Artes plásticas

Escultura: lo principal es la belleza y la gracia. Representa las virtudes o las ideas de la naturaleza o el ser humano, las cosas que son dignas de admirar y de imitar. 
    
Pintura: lo principal es la expresión, la pasión y el carácter. La pintura moderna (...) no deja de parecerse a la poesía latina moderna, es hija de la imitación y nace de la reminiscencia. La pintura es un jeroglífico (407)
     
Poesía

Se trata de un arte que pone en juego a la imaginación mediante las palabras. La fantasía del lector es la tela donde la poesía traza sus imágenes. El propósito del poeta al movernos la imaginación es revelarnos las ideas.
     
Música

Prodigioso arte, las cuatro voces de la armonía representan: el reino mineral, reino vegetal, reino animal y el ser humano. La música no presenta las ideas o niveles de objetivación de la voluntad, si no que presenta la voluntad misma.  

Según Schopenhauer, el ritmo equivale a la arquitectura. La armonía a las artes plásticas. Y la melodía que es el primer plano de la música (en su época) equivale a la voz de la voluntad.     
  
"La música está lejos de ser un recurso de la poesía, es un arte independiente, el mas poderoso entre todos y por eso alcanza sus fines por sus propios medios, no necesita de las palabras del canto o la acción de una ópera. Las palabras son para la música un aditamento extraño y de valor subordinado, toda vez que el efecto de los tonos es mas poderoso" 

En el romanticismo se da un cambio en el planteamiento de la música con respecto a las épocas anteriores. Lo sublime, en el romanticismo da un paso al frente, mientras lo bello queda en las filas del clasicismo. La música se impone a la poesía y se convierte en el arte por excelencia, generando una influencia histórica que direcciona el rumbo de la música occidental. La música pura es para Schopenhauer la mayor de las artes, los sonidos al ser la voz de la voluntad la afectan directamente, ese es el motivo por el cual no es posible escapar a las emociones que se apoderan de quien escucha. Sin embargo para que la música afecte a quien la escucha es necesario  actuar dentro de sus códigos. La música china no produce el mismo efecto en África, ni los cantos de los esquimales congregan a los alemanes. Cada pueblo tiene su música y la maraña de sus costumbres condiciona la forma como esta afecta a quien la escucha. No por esto la valoración que hace Schopenhauer de la música se debilita, al contrario, que todos los pueblos, en todas las épocas, se expresen musicalmente avala su teoría. 
       La voluntad de vivir se manifiesta constantemente de forma cíclica, es decir: rítmicamente, todo tiene su ritmo. Las diferentes fases de la vida van asociadas a diferentes ritmos, y los matices de las circunstancias se pueden ilustrar a través de la armonía (en occidente). Cuando hay algo fundamental que transmitir nace la melodía, estos tres elementos crean sensaciones imposibles de describir a través del lenguaje o de las diferentes artes. Los estados de trance, de inspiración, conducen a la calma, a estos estados los denomina Schopenhauer contemplación. Y la única manera de llegar a ellos, en su sistema filosófico, es a través del arte, siendo la música lo mas sublime dentro de las manifestaciones artísticas. 
    
La música afecta el cuerpo, puede hacerlo llorar, temblar, reír, etc. La afectación corporal es inevitable cuando la música entra en acción. Esto no lo logran las demás artes, como mucho la tragedia puede provocar alteraciones físicas, pero estas no son inmediatas, ya que aparecen paulatinamente y son el resultado final de un cúmulo de sucesos que se le presentan ordenadamente al espectador, y este al sintetizar los hechos puede llegar a reaccionar físicamente ante las circunstancias. La música se salta todo esto y afecta directamente a quien la escucha. Quiera o no  resultará afectado por ella.

Por otro lado al hablar de Platón y Kant dice que sus sistemas filosóficos son imperfectos, pues las manifestaciones artísticas para ellos no tienen el estatus que se merecen. Mientras que para Schopenhauer la contemplación estética nos libera del peso de la existencia. Utilizando los mismos recursos literarios que Schopenhauer utiliza en repetidas ocasiones, se puede decir que la música da momentos de descanso a Atlas, o a Sansón, incluso la música reconfortaría, por unos instantes a quien carga la cruz, Simon de Cirene es la contemplación estética que aligera la carga de el viacrucis de la humanidad.
      
El estado de contemplación es el que permite al compositor crear. De igual forma el estado de contemplación es el que ha de buscar interiormente y provocar exteriormente el intérprete musical, pues la responsabilidad que cae sobre un auténtico músico va mas allá de la simple ejecución rítmica, armónica y melódica. El músico ha de crear estados de contemplación estética.

El pensamiento sobre el arte  de Arthur Schopenhauer está expuesto en el libro tres de El mundo como voluntad y representación, libro considerado por el autor como su obra principal. Según entiendo, la voluntad es aquella fuerza de la que emana todo.



   El mundo como voluntad y representación, en el contexto de este breve escrito, guardando las proporciones, podría llamarse:
 El mundo como música y representación.




¡Saludos musicales!














sábado, 4 de enero de 2020

Ópera

 Reflexionar sobre la relación de la música con las demás artes y disciplinas del conocimiento y la función que ésta desempeña en otros contextos fuera del marco de la creación artística conduce a una comprensión mas amplia de sus posibilidades. Sabemos que la música está presente en rituales mágico-religiosos, política, medios audiovisuales, deportes, tiendas de ropa, en el baño, etc. La Música como un Arte Interdisciplinario nos habla sobre la vinculación del hecho sonoro a actividades culturales como la creación plástica, audiovisual o literaria, la gestión musical o la actividad concertística clásica o de músicas populares. Quiero compartir algunos de mis pensamientos al respecto. Me esforzaré en ser breve y directo, pues muchas veces la pompa literaria o musical no son otra cosa que incontinencia verbal sin sentido o ruido hueco. La brevedad puede estar llena de contenido y perdurar milenios, las dos palabras latinas “Sapere Aude” son un ejemplo de ello. Una de mis intenciones es estimular la reflexión ya que ésta es necesaria para adquirir conocimiento y el conocimiento, según han concluido los sabios, educa y nos hace libres. Anexo una partitura a este escrito por que como dice el refrán zapatero a tus zapatos, mi profesión es la música y lo que escribo suele estar íntimamente ligado a pensamientos musicales.

Para hablar de Música como Arte Interdisciplinario es necesario tener en cuenta hechos históricos; contexto social; ideologías políticas; tendencias artísticas; aspectos sociológicos; teológicos; etc., pues la música registra el espíritu de una época, es una imagen sonora plasmada en el tiempo. Así como las pirámides Mayas nos remiten a un momento histórico lleno de contenidos, las joyas de la música son puntos de referencia que cumplen el mismo cometido. Cuando pienso en música tengo en mente desde  las canciones de cuna hasta las grandes sinfonías. Pero cuando pienso en arte musical tengo en mente la técnica instrumental y la teoría, dos villas en el reino de la música. En honor a la verdad la música nunca ha dependido de la academia y mucho menos de la notación musical, ella puede prescindir de los instrumentos y seguir existiendo, este hecho se comprueba fácilmente en la música tradicional de los diferentes pueblos de la tierra, que es una constante en la historia de la humanidad. Las mamás cantan a sus bebés desde antes de nacer y ellos balbucean canciones, hacen palmas y bailan antes de aprender a hablar o caminar. Así que puedo afirmar con convicción que el arte musical es una pequeña parte de la música y depende de ella, no al revés. Entiendo por Arte: cualquier actividad o producto realizado con una finalidad estética y también comunicativa. Hay que conocer y dominar los elementos constitutivos de la música: ritmo, melodía, armonía y las leyes que los rigen para crear arte musical. En nuestro contexto estamos hablando de Música como Arte y de como interactúa con otras disciplinas. Un ejemplo muy antiguo y conocido es la interacción de la música con el teatro, un arte que con el fin de que reflexionemos sobre la sociedad en la que vivimos y sobre nosotros mismos aborda el tema de la condición humana a través de la comedia, el drama o la tragedia, planteando cuestiones como el amor, el odio, el bien, el mal, el poder, la justicia, lo bello, lo sublime, la vida, la muerte, etc., cuando el teatro y la música se unen entramos en el terreno de la ópera o del teatro musical
      
Hablemos de La Flauta Mágica de Wolfgang Amadeus Mozart y Emannuel Schikaneder (actor, escritor y empresario teatral). Una ópera estrenada en 1791, en pleno auge de la revolución francesa (1789-1799). En La Flauta Mágica Mozart y Schikaneder nos hablan de como el poder a través de la mentira manipula e incita a la violencia para lograr sus fines. Para tratar esta cuestión lo hacen a través de la pomposa y escandalosa falsedad de La Reina de la Noche, un personaje que genera angustia y desazón en los mas vulnerables incitándolos al asesinato. En la segunda mitad del siglo XVII La Reina de la Noche representaba el poder monárquico anticuado y rancio que estaba en declive y a punto de desaparecer. En La Reina de la Noche se revela toda la perfidia y maldad de un poder manipulador cuyo único objetivo es seguir vigente a costa de lo que sea. La Reina amenaza, asusta, grita, agita, hace sufrir a su propia hija: Pamina. La aterroriza, le augura lo peor si no le obedece. Hago un breve inciso para recordar que El Arte puede tener lecturas diferentes y que su riqueza radica en que una sola obra permite múltiples interpretaciones dependiendo del momento histórico en que se proyecte y de quien la interprete. Retomando el hilo, decía que La Reina, en mi interpretación, el poder rancio, egoísta, cruel, macabro, irascible… pone un cuchillo en manos de su hija Pamina, en mi interpretación el pueblo. Exhortándola a asesinar a Sarastro, el rival de La reina, en mi interpretación los derechos fundamentales de la población. La Reina pide a Pamina que asesine a Sarastro so pena de maldecirla por siempre si no cumple con su designio. 

La Reina de la Noche canta con una belleza que hipnotiza, en una época de convulsiones políticas, sociales y militares. Mozart con su música amplificó el mensaje de Schikaneder y juntos le quitaron la máscara al sistema, cantándole con firmeza al pueblo y a sus dirigentes, golpeando enérgicamente la cacerola del tiempo con la cuchara del arte durante más de dos siglos sin interrupciones. Gracias a la unión de la música con las demás artes que participan en la ópera, podemos hoy reflexionar sobre diversos temas de interés social siempre presentes. 
La Flauta Mágica está llena de mensajes de moralidad. Es una obra llena de sabiduría. Habla del triunfo del bien sobre el mal. La Reina de la noche, el poder, con su elocuencia y riquezas, pierde la batalla gracias a la sensatez de Pamina, el pueblo, que no está de acuerdo con las oscuras intenciones de su madre. La música en este tipo de obras aparece cuando el texto ya no da más de sí y se hace necesario mover las emociones. Como explicó acertadamente el filósofo Arthur Schopenhauer: el libreto nos muestra las causas y la música sus efectos. Aquí pueden escuchar La Reina de la Noche: 

Esta es mi interpretación. Animo a que cada quien haga la suya, ya que nadie puede pensar por nadie. Cada ciudadano es Pamina y tiene su Reina de la Noche, un poder político que lo hipnotiza. Cada uno es responsable de matar o proteger a Sarastro, sus derechos. 

Aquí está La Reina de la Noche: 

Cuentan quienes conocieron a Mozart que él leía varios libretos antes de elegir cual convertir en ópera. Mozart creó obras interdisciplinarias que han perdurado siglos conservando su valor. La partitura que anexo es una composición mía que intentando imitar el estilo de Mozart. Quienes dominen el arte musical podrán leerla con su instrumento o escuchar mentalmente la música. Quienes se dediquen a otras cosas o estén recibiendo formación musical a nivel artístico podrán escucharla aquí:


Cuentan quienes conocieron a Mozart que él leía varios libretos antes de elegir cuál convertir en ópera. Mozart creó obras interdisciplinarias que han perdurado siglos conservando su valor. La partitura que anexo es una composición mía que intentando imitar el estilo de Mozart. Quienes dominen el arte musical podrán leerla con su instrumento o escuchar mentalmente la música. Quienes se dediquen a otras cosas o estén recibiendo formación musical a nivel artístico podrán escucharla aquí:




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lunes, 28 de octubre de 2019

Cargos públicos y música

Un buen gobierno dignifica las labores de quienes intervienen con ellos en la vida púbica, en este caso hablaré de manera general de los artistas. Bien conocida es la influencia que tuvo el mecenazgo a las artes en la Florencia del renacimiento italiano. Figuras como Miguel Ángel, Rafael o Leonardo Davinci son trascendentales en este episodio de la historia. La Camerata Florentina existió gracias al conde Giovanni De'Bardi. La fama inmortal de los Medici esta estrechamente ligada a estos figuras y viceversa.Bach, Mozart o Beethoven enaltecen el poder de sus mecenas, quienes eran conscientes de la importancia que tenía resaltar la genialidad de estos compositores para dar lustre a sus cortes en aquella época y en épocas posteriores. Cuando George Gershwin murió la presidencia de Estados Unidos envió un navío para que sus restos mortales fueran trasladados. Irving Berlin, considerado el padre de “la canción americana”, fue responsable de componer música para elevar la moral de las tropas y dar confianza a la población de Estados Unidos cuando se hizo inevitable la intervención de este país en la segunda guerra mundial. Disney también fue convocado y participó desde su campo, su trinchera, a cumplir con el llamado patriótico. El Rey Sol en el palacio de Versalles depositó en Jean Baptiste Lully la enorme responsabilidad de dar pompa a su corte a través de la Tragedia Lírica, como consecuencia de esto los siglos posteriores disfrutan del Ballet. El Rey Sol era bailarín de ballet, en los retratos de la época se puede ver en posición de ballet al gremio cortesano.Sería una necedad decir que los gobernantes y  monarcas giraban en torno al arte, pero ¿Qué sería de la reputación de la corte inglesa sin la música de Handel? O de figuras controvertidas como Hittler y Mussolini quienes inflaron su reputación destacando la música de Wagner y de Verdi respectivamente. Pero no fueron los únicos, ya que un capítulo importante de la historia de la música está directamente relacionado con la “Música Nacionalista”. Recordemos que el sistema político ruso entendió que a través de sus compositores podría establecer una identidad duradera. Otro ejemplo de como los gobernantes hábiles han puesto su sello en la historia apoyándose en el talento musical de algunos ciudadanos es el Jazz Latino, una mezcla de folclor caribeño con la “música prohibida” por el sistema. El Latin Jazz es sin duda un uno de los géneros mas auténticos de la música de occidente en el siglo XX. 


De la misma manera que un gobernante o un funcionario público de amplias miras sabe reconocer la importancia que tiene para su cometido dignificar las artes también puede suceder lo contrario. Cuando se valora superficialmente el poder del arte la fama de quienes le quitan dignidad es negativa. Cuando el talento es vulgarizado ante públicos que no están a la altura del arte es fácil adquirir esta fama y muy difícil mejorarla.El público, entendido en este contexto como un grupo de personas que se reúnen en algún lugar con fines estéticos, no está obligado a valorar expresiones artísticas que se le presentan inesperadamente. Cierto es que seducir los ambientes es una de las responsabilidades del artista, pero también es cierto que no se le puede exigir a una persona que va en el metro que valore la intervención inesperada de un músico virtuoso, mucho menos se le puede reprochar que en lugar de disfrute sienta incomodidad, pues lo que puede ser “música sublime” en un escenario adecuado, con un público adecuado, en condiciones determinadas y con un propósito definido, puede ser “ruido inoportuno”, en un vagón de metro, en un bloque de apartamentos o en una sala de espera de una oficina cualquiera donde las personas tienen sus mentes ocupadas en asuntos diferentes a la contemplación estética. Romper bruscamente los códigos naturales de un espacio determinado con “buena música” puede convertirla en “ruido vulgar”. La cosa empeora cuando el músico, solo o acompañado, es conducido por la autoridad del gobernante a realizar una intervención de tal tipo.  Pues se puede ver enfrentado a una situación que considera, con justa razón, un menosprecio de su arte. Que horas, días, semanas, meses incluso años de serio trabajo se vean reducidos a: “por que no tocas o hablas de tu arte a estas personas que están aquí sentadas esperando su turno, puede herir en lo mas profundo al portador del arte” o el típico “así te das a conocer”. La historia no recuerda con mucho aprecio al “señor” que obligaba a Bach a vestirse con uniforme militar y tocar en el grupo de caza, cuando el genio de Bach estaba enfocado en la creación de la música mas elevada de los últimos siglos. El gobernante que expulsó de una patada a Mozart de la corte tampoco tiene muy buena prensa en la historia, Mozart estaba reclamando su derecho a un público digno y a un trato acorde con la grandiosidad de su obra y en cambio le obligaban a crear "música con amables funciones digestivas" para divertir a una muchedumbre que no estaba a su altura.  El que ostenta el poder puede caer un ridículo de proporciones descomunales ante sus contemporáneos y de sus remotos descendientes, como aquel gobernante que envió a la prisión domiciliaria a Galileo Galilei cuando éste comunicó que la tierra giraba alrededor del sol. Una posición vergonzosa y una reputación despreciable igual que la que tienen los “santos inquisidores” ante la historia. Ni que decir de esos gobernantes que expulsaron a los jesuitas de España desterrando con ellos el espíritu intelectual de la época. O aquellos brillantes líderes que enviaron a los hermanos Grimm fuera de las fronteras. Pero también es cierto que no todos los que dicen ser “artistas” lo son. Muchos gritan a los cuatro vientos que poseen un gran talento, y se empecinan en estar cerca de quienes ostentan cargos influyentes. Estas personas muchas veces lo único que poseen es una gran vanidad y un ego que los supera, llaman arte a lo que no es mas que orgullo, frustración, envidia y autoadulación. Seres vulgares y engatusadores que al gozar de la aceptación de quienes ostentan el poder usurpan el lugar de quienes realmente lo merecen. Esta clase de parásitos que se alimentan como pulgas de la sangre  del cuerpo del arte merecen ser invitados a poner su obra al lado de la de los gigantes que han ganado un lugar en la historia gracias al verdadero talento. Un talento tan poderoso que prescinde del beneplácito del gobernante y de la aprobación del público casual para elevarse como el sol y proyectar luz aunque las nubes lo tapen. 
Afortunada la época en la que coinciden aquellos que saben cual es su lugar y respetan su posición respetando la de aquellos que pueden engrandecerles. Esculpiendo con dignidad en el mármol de los tiempos sucesos que servirán como puntos de referencia a quienes ocupen su lugar en épocas posteriores. Merecen alabanza e inmortalidad aquellos que brindaron oportunidades dignas a los auténticos portadores de la diferentes manifestaciones artísticas, de igual manera merecen ser recordados aquellos artistas que estuvieron a la altura de servidores públicos y gobernantes educados.  
¡Saludos musicales!
hansbetancourth.com





lunes, 21 de noviembre de 2016

Prólogo

Donde se acaban las palabras empieza la música. En este blog donde se acaba la música empiezan las palabras. Expresar en palabras el significado de la música es una tarea que requiere una enorme dedicación y probablemente aquel que la realice algún día, con el rigor necesario, terminará por escribir que donde se acaban las palabras empieza la música. Y vuelve a empezar. Mas fácil es reflexionar sobre la música como arte interdisciplinario, es decir, sobre la relación de la música con las demás artes y la función que ésta desempeña en otros contextos fuera del marco de la creación artística. Sabemos que la música está presente en rituales, política, medios audiovisuales, deportes, tiendas de ropa, en el baño, etc. Para mi como músico de vocación y de profesión ha sido tremendamente enriquecedor el estudio de la música desde este enfoque. Así que quiero compartir algunas reflexiones al respecto.

Pero antes de empezar lo primero que quiero hacer es agradecer al lector por dedicar parte de su tiempo a la lectura de este blog. Valoro el hecho de que me lea y pondré mi mejor intención en ser directo, transmitiendo lo que pienso de la manera mas clara que me sea posible. No pretendo confundir, ser parlanchín o pendenciero. Sencillamente quiero plasmar en palabras lo que no puedo expresar con sonidos. Cada cosa en su lugar.  Espero estimular la reflexión, pues ésta es fundamental para adquirir conocimiento. Intentaré ser breve por que el tiempo de cada uno es valioso y no quiero malgastarlo, por que como dijo el sabio del siglo de oro: "lo bueno si breve dos veces bueno, y aun lo malo si poco, no tan malo". Empecemos entonces.

El componente histórico; el contexto social; las ideologías políticas; las tendencias artísticas de cada época; lo que simboliza la música según el momento; son el caldo de cultivo del arte musical y su comprensión arroja luz sobre el enigma que plantea el "significado" de la música. El estudio de la técnica instrumental y de la teoría de la música es como una pequeña isla en el océano de las artes. Digo una "pequeña isla" por que la música no se reduce a sus componentes técnicos instrumentales y teóricos. En honor a a la verdad la música nunca ha dependido de la academia y mucho menos de la notación musical, incluso puede prescindir de los instrumentos y seguir existiendo, este hecho se comprueba con facilidad en la música tradicional de los diferentes pueblos de la tierra, el canto y la danza son una constante en la historia de la humanidad. Así que se puede afirmar sin temor que el "arte musical" es una pequeña parte de "la música" y que ésta no depende de aquél.

Gracias al vínculo entre música y literatura podemos acceder de primera mano al pensamiento  de autoridades musicales como Schumann, Berlioz, Stravinsky, Schoenberg, Wagner, Bernstein, Boulez, entre otros, la suma de la producción literaria y musical de estos compositores eleva sus obras a una categoría que exige además de pasión por la música, pasión por la literatura.

Acercarse a la obra de Monteverdi, Vivaldi, Mozart, Verdi, Rossini, requiere una parada importante en la lectura de los libretos de sus óperas, en ellos poesía y música, como leña y fuego, se unen para brindar luz y calor al entendimiento ¿Cómo puede alguien decir que comprende la ópera sin conocer los libretos ni las implicaciones sociales que tienen de fondo?

A través de la la lectura encontramos reflexiones sobre música en la obra de Platón, Descartes, Schopenhauer y otros pensadores, que además de abrir las puertas de la filosofía, demuestran que el fenómeno musical está vinculado a diferentes disciplinas.

Iré desarrollando este blog en torno a "la música como arte interdisciplinario".

¡Saludos musicales!

hansbetancourth.com